SISTEMAS ANTIRROBO DE VEHíCULOS

Este sistema puede conectarse a la salida de un sistema de alarma ya instalado. Por otra parte, se trata de un dispositivo «personal», en el sentido de que la señal de alarma se envía directamente al teléfono móvil del propietario del vehículo. Claro que para ello ha de disponer de teléfono móvil GSM y tenerlo siempre conectado. Los mensajes de alarma enviados en forma SMS tiene las coordenadas geográficas que definen la posición del vehículo robado, ya que el sistema incorpora un receptor GPS de gran precisión. Estos mensajes se transmiten automáticamente si el sistema antirrobo entra en funcionamiento y además el equipo puede ser interrogado desde el teléfono móvil del propietario en cualquier momento para conocer la posición exacta del vehículo. A la recepción del mensaje el propietario puede intervenir personalmente o alertar a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado (la poli). Este sistema es totalmente gratuito y no es exclusivo para coches sino que se le puede colocar a camiones caravanas y embarcaciones marítimas.

Lo último en sistemas de seguridad para los coches pasa ahora por BlueTooth y el servicio ofrecido por Auto-TXT. El sistema usa un modulo BlueTooth cuya huella es única. Al arrancar el coche, el sistema será capaz de identificar la señal BlueTooth del propietario.

Si el dueño del coche no lleva el móvil con la señal BlueTooth correcta, el sistema de seguimiento se activará, y la central estará avisada para poder, en cualquier momento, inmovilizar el coche gracias al inmovilizador que forma parte del sistema Auto-TXT.

Así que, no sólo necesitarás las llaves del coche para arrancarlo además, si no quieres quedarte parado en el próximo semáforo y ver un furgón blindado de policías asaltar tu coche, más vale que no se te olvide el móvil en casa. El sistema cuesta entre 400 y 515 €.

El grupo GM añadirá a modelos de 2009 el servicio “Slowdown” a su catálogo de servicios telemáticos de emergencia, que lleva la empresa OnStar. Este sistema ya había sido anunciado antes pero ahora es cuando va a iniciar su andadura a nivel comercial y a gran escala. Se irá extendiendo a más modelos según pase el tiempo.

Una vez el cliente reporta que su coche ha sido sustraído, OnStar se comunica con las autoridades dándoles la posición del vehículo. Los agentes, en las cercanías del infractor o en una persecución, pueden dar una orden de parar el vehículo.

Una vez dada la orden vía satélite de OnStar, el vehículo sigue manteniendo la dirección asistida y los frenos, pero el motor va perdiendo potencia hasta quedarse parado, con lo que la juerga se habrá terminado. Así dicen que evitarán gastos a la policía y reducirán las consecuencias de las persecuciones, entre ellas la de que el coche del cliente salga dañado.

La ventaja fundamental del sistema es que no es imprescindible que los agentes estén muy cerca para forzar la parada del prófugo, como es el caso de los inhibidores eléctricos, tiene la gran pega de que siendo un sistema tan extendido, tarde o temprano será reventado por los ladrones profesionales, aunque al pringao que se da una vuelta le puede caer la del pulpo.

Lamentablemente es un servicio que sólo funcionará en EEUU-Canadá y se calcula que el primer año se beneficiarán de esta tecnología un millón de vehículos. Los usuarios son libres de usar o no el servicio, ya que no es gratis.