Justicia hecha a medida: La Doctrina Botín
La semana pasada a Audiencia de Palma dictó el Auto por el cual se mantenía la imputación de la Infanta Cristina por dos delitos contra la Hacienda Pública.
Otra vez le toca decidir al juez Castro, a quien se le podría conceder el título de molt honorable, por su actuación hasta ahora intachable a pesar de las presiones a las que ha estado sometido si aplica o no la Doctrina Botín.
Esta doctrina fue aplicada por el Tribunal Supremo, a D. Emilio Botín, que viene a decir, que considera que el perjudicado por el delito fiscal es la Agencia Tributaria (el Estado) y si la Abogacía del Estado, ni la Fiscalía acusan a la infanta por estos delitos, no será juzgada.
Viendo la actuación del fiscal Horrach hasta ahora, está clarísimo que no va a pedir la imputación de la infanta, lo que demuestra la parcialidad del Ministerio Fiscal y veremos qué decide la Abogacía del Estado.
No es de extrañar que la confianza de los españoles en la Justicia esté por los suelos y estas actuaciones judiciales confirman que la Justicia no es igual para todos
Los jueces se quejan en numerosas ocasiones de la falta de medios y con razón, hasta el propio Presidente del Tribunal Supremo dijo que las leyes que tenemos están caducas, refiriéndose a la Ley de Enjuiciamiento Criminal que es del año 1918 y como dijo: “está prevista para juzgar a los que roban gallinas”.
Es una pena pero aunque se modifiquen la Ley, siempre habrá alguien que la interpretará y beneficiará a unos u otros dependiendo de quién seas.
Siempre ha sido así, y esto no va a cambiar.
María José Martín Moreno
