
UN GRUPO MUY ESPECIAL
Ya han pasado unos cuantos añitos ¿trece?, desde que comenzamos esta actividad en torrejoncillo. Dos días de clase a la semana, en los que, además del ejercicio físico para estar en forma, se han fraguado sentimientos de amistad, cariño y respeto que, en el fondo, son el valor y la razón de ser en todo.
¿El motivo de escribir esto? Porque en justa correspondencia, tenía que expresar de algún modo mi satisfacción para con mis alumnas, a quienes he tenido el placer de conocer en estos años y agradecerles la constancia, el interés y afecto que de ellas he recibido.
Aunque, excepcionalmente he tenido algún alumno, han sido siempre las féminas las que han movido el motor desde el principio, con su vitalidad y dinamismo. Activas, constantes, trabajadoras y participativas durante la clase. Su espontaneidad es fundamental, haciendo unas clases dinámicas y divertidas ¡ojo! para quien piense que son flores, solo digo la verdad. Ellas son el motivo de que sigamos en la brecha.
Por estos años que llevamos compartiendo vuestro trabajo en clase, vuestra compresión a mi esfuerzo, porque sois “la monda” y me controláis para que “de caña” o para decirme que la clase ha sido “divina” o “queremos relajación” o “Jesús, para ya” etc. Bueno, que me siento muy bien con vosotras y que me alegro de poder decir que hemos añadido un granito más a todas las actividades que se realizan en nuestro pueblo, Torrejoncillo.
Un abrazo: Jesús Barcenilla Asensio
Esto es lo que escribe el profesor de gimnasia sobre sus alumnas, lo cual se lo agradecemos mucho, pero nosotras también teníamos que escribir algo sobre él, lo primero que se nos viene, es expresarle todo nuestro cariño con una de las palabras más bonitas de nuestra lengua: GRACIAS. No recordamos como serían los primeros años hasta que se fueran configurando las características del grupo, pero en los últimos 10 años se han creado unas relaciones difíciles de describir con palabras, pero sí con los hechos. En el grupo hay personas que han sido fieles a lo largo de estos años, pero siempre al comienzo del curso se incorporan gente nueva que poco a poco se van integrando y a sentirse a gusto, otras personas que por razones de trabajo o personales lo han tenido que ir dejando, pero siempre se van con un buen recuerdo; las que estamos, hacemos lo posible por no faltar, 1º para mantenernos en forma dentro de nuestras posibilidades y 2º por pasar una hora muy agradable, nunca hemos tenido que soportar el mal humor o un mal gesto de nuestro profesor, siempre nos recibe con una gran sonrisa, con una palmadita en el hombro, “vamos chicas” y al final a despedirnos a la puerta, teniendo en cuenta que es un grupo muy variado, en cuanto a edades se refiere y que cada una lleva un ritmo distinto, nuestras horas de gimnasia pasan desde meternos caña, a clases de relajación, pesas con aeróbic…. clases muy dinámicas divertidas y nada repetitivas.
Aparte de nuestro grupo también tiene el grupo de niños y adolescentes de kárate, con los cuales conecta perfectamente y del que ha destacado Adrián Pascual con cinturón negro, otros niños con cinturón marrón y así hasta los más pequeños que se inician en este deporte.
Tenemos que hacer mención especial a la fiesta de navidad y de final de curso, imaginénselo con 20 ó 25 chicas, y para nada se encuentra incomodo, todo lo contrario, se disfruta mucho… y así, así, podríamos seguir escribiendo sobre este grupo, pero ya es suficiente, el caso es que pensamos escribir algún artículo sobre gimnasia de mantenimiento y nos ha salido de esta manera: un artículo con sentimientos de cariño, que salen de un grupo muy especial: el del profesor y sus alumnas(os) de gimnasia y de kárate