En tiempos de calentamiento electoral
Vaya por delante que a mí no me gusta el cine de Alex de la Iglesia, si acaso, recuerdo a Carmen Maura enfrentada a una comunidad medio loca peleando por las cornisas… pero sí hay una cosa que le alabo al presidente de la Academia de Cine: en este país en el que nadie reconoce hacer nada malo aunque las pruebas sean fehacientes, se agradece que un cineasta reconozca que el negocio va mal no por la desidia política ni por la incomprensión a su indiscutible genio… sino porque no han sabido llegar al público con sus historias. Y es que esto de ir al cine está complicado… entre que hace frío, es caro, para algunos no hay ni una peli decente… en fin, que te quedas en casa bajandótelas de Internet o poniendo el vídeo en una pantalla plana de esas que quitan el hipo. No merece la pena ir ni a meterle mano al que llevas al lado, y si para colmo la película es española… pues nada, a ver series norteamericanas en las que salen mejores actores. El cine español arrastra una mala fama que no tiene en general -¿Alguien se perdió “Celda 211” el año pasado ¿Y ahora “Después la lluvia”?- y sufre de la vaguería del personal que bastante tiene con aguantar el telediario. Estamos enfermos de desidia y vamos a lo seguro, por eso los portugueses, primos hermanos, se han quedado en casita en vez de ir a votar. Si al final dejaremos de fumar por no salir a la calle. Panda de vagos, así nos va, al menos los únicos que trabajan para el país son los políticos… están calentando motores como locos. Qué alegría les da meterse en berenjenales electorales, y nosotros, que estamos muy ocupados racaneando, sin hacerles ni caso… y es que no saben llegar al público… claro, que eso no lo reconocen, por eso me cae tan bien el señor Alex de la Iglesia ¡Qué se presente a las elecciones, que hago el esfuerzo de ir a votarlo y hasta de ver su última película! Eso sí, Itziar en el papel de Rubalcaba, please.
Charo Alonso.
Fuente: DigitalExtremadura
Por cierto, Pepa. Claro que hay veces que tiene que ver la gimnasia con la magnesia, que le pregunten a Deferr o a Carballo. Lo mismo que el tocino con la velocidad. Las frases hechas no son refranes.
Me refería a la falta de conexión entre la actividad desmedida de Álex de la Iglesia y la supuesta apatía de los políticos. Me parece que no tiene nada que ver la exaltación de una persona hiperactiva que tan pronto entra como sale y que a veces toma decisiones basadas en impulsos con la situación de superación en que se encuentran los representantes del pueblo, que se han visto sobrepasados por una crisis económica de la que no saben nada, no saben qué hacer y no saben cómo salir de ella.
Hay veces en las que la gimnasia tiene mucho que ver con la magnesia, aunque no te lo parezca, Perico. en este país existe una desidia y una falta de interés por lo que importa que asusta. Y son los políticos son los que más desidia arrastran y si ponen algo de entusiasmo en aquello que hacen no es para otra cosa que asegurarse una buena pensión para cuando se jubilen que les permita vivir sin apreturas, pobres!! A pesar de todo, la vida merece un poco de entusiasmo Podemos hacer mucho por no dejarnos gobernar por el desánimo, me parece a mí. Enhorabuena por el artículo, Charo, ya sabes que me gusta leerte.
A mi entender se refiere a la falta de interés y a la desidia que parece que controla desde hace mucho nuestro pais.Tanto es asi que en lugar de quejarnos por cosas importantes como el retraso de la jubilación,la subida del iva o la Ley Sinde, ponemos el grito en el cielo porque prohiben fumar en espacios publicos…En fin,nos hace falta un poco mas de coherencia que al fin y al cabo es lo que pide el articulo(como la que ha tenido Álex de la Iglesia) y no ser unos hipócritas.
No entiendo nada. ¿Qué tiene que ver la gimnasia con la magnesia?